30 de septiembre de 2011

La peregrinación, con acento pro-vida y bautismal..


La tradicional expresión de fe, que suele ser multitudinaria, se enmarcará esta vez en el Año de la Vida convocado por la Conferencia Episcopal Argentina, por lo que se le pedirá especialmente a la patrona nacional por “el don de la vida que Dios nos regala”.

Como todo don o regalo implica también una tarea: cuidar la propia vida, la vida de todos, en todas sus etapas, desde la concepción y hasta la muerte natural. También es cuidar la vida en todas sus dimensiones: física, espiritual, familiar, social, política y religiosa”, precisaron en la convocatoria los presbíteros Juan Bautista Xatruch y Martín Rebollo Paz, de la Comisión Arquidiocesana de Piedad Popular.

Itinerario bautismal. La peregrinación también se enmarcará en el itinerario bautismal de la arquidiócesis de Buenos Aires, por lo que se ofrecerá el Bautismo a los peregrinos que se encuentre en un camino de formación para recibir los sacramentos de la Iniciación Cristiana.

El signo bautismal se impartirá en el Puesto del Seminario Metropolitano, instalado en el cruce de la ex ruta nacional N° 7 y la ruta N° 6. Los interesados en recibirlo deberán anotarse en el santuario de San Cayetano, de Liniers, con la respectiva nota de sus parroquias o colegios. Los padrinos podrán caminar junto a sus futuros ahijados o esperarlos en dicho puente.

“Este gesto bautismal quiere ser un signo de vida, ya que en el Bautismo recibimos la vida de Dios, que nos hace hijos y hermanos”, recordaron desde el Seminario.

La imagen auténtica recibirá a los peregrinos. La imagen auténtica de la Virgen de Luján estará en la puerta de la basílica recibiendo a todos y cada uno de los fieles, ya que el templo está en proceso de restauración y permanece cerrado preventivamente.

Será una alegría para el peregrino tener a la Virgencita tan cerca, recibiéndolos, desde la puerta de su casa, que es la casa de todos los fieles” sostuvo el vicario parroquial de la basílica de Luján, presbítero Darío Gorini, luego de recordar que fue en 1982 la última vez que la imagen auténtica de la Virgen estuvo en las puertas del templo.

Las misas y las confesiones se realizarán en la Plaza Belgrano, frente a la basílica Nacional Nuestra Señora de Luján. Para ello, se montará un altar especial, una gran carpa para las confesiones y un circuito que permitirá que el peregrino pueda ver a Nuestra Madre, después de haber caminado 60 kilómetros.

Aspectos operativos. Los peregrinos contarán con el respaldo de la Dirección de Culto bonaerense, la Policía de la provincia de Buenos Aires, Defensa Civil y Emergencias Sanitarias, entre otras instituciones.

En cuanto a lo operativo, detallaron que desde la localidad de Merlo hasta Luján, serán más de 50 los puestos sanitarios, además de 13 de apoyo y ambulancias.

Más de 5.000 servidores experimentados de distintas parroquias, colegios e instituciones confesionales junto con organismos nacionales, provinciales, de las fuerzas de seguridad y ONGs “darán lo mejor de sí para acompañar a sus hermanos peregrinos y darles ánimo a llegar en su caminata”, señalaron los organizadores.

En un trabajo solidario y mancomunado, y bajo la premisa de ‘cuidar la vida’ del hermano, los voluntarios estarán dispuestos a acompañar en el camino a los peregrinos, y a su vez ellos –a través de su servicio- también están peregrinando y se encontrarán con esta Madre de todos que es la Virgen de Luján”, subrayaron.

Informes: (011) 4502-5137/4503-0192, correo electrónico peregrinacionlujan@hotmail.com o en la página web www.peregrinacionlujan.org.ar .+